El dueño q es el profesor es excelente. Sabe muchísimo de pilates, de entrenamiento, de rehabilitación. Muy buen lugar con seguimiento individual. Lo recomiendo
Atención personalizada que te permite una completa rehabilitación en caso de necesitarlo. Ariel (su dueño) es muy buena onda y además, mientras haces tú rutina, escuchas muy buena música.